LÃquido podrido
Que años lleva guardado
Para regar el campo del cielo de mi boca.
Dejará en mà corriente de agua turbia
Que empoza en cada agujero de olvido,
En cada hueco escondido
De esta cruel memoria.
Dos figuras convertidas en humo
Sobre la pared, sin aire,
Buscando a quién respirar,
Debatiendo entre el consumo
De ese momento
Repartido en fragmentos.
Entre espacios que deja
Ese manantial que me evapora al
LÃquido podrido.
Pestilencia que incorpora,
Entre el blanco papel de la intimidad,
Una historia,
Un recorrido.